viernes, 24 de octubre de 2014

;

Ya no queda más besos, sólo rap y melancolía. Ya no queda más tú, más nada. Ser insuficiente puede llegar a jugarme una mala pasada por esa clavícula a la que estoy atada. No queda más que música que pueda calmarme, nada que haga que te tenga aquí de nuevo. Porque cada vez estás más lejos y yo más fuera de mí. Un cuerpo con aparente corazón pero que se lo llevó cuando me sonrió. Y que queda, simple cenizas consumidas.

miércoles, 15 de octubre de 2014

Te lo mereces.

Y si nos van a criticar hagamos lo que hagamos ¿por qué no arriesgar? Por qué no decirle al mundo entero que te quiero. ¿Por qué no hacer lo que queramos sin necesidad de pensar en el qué dirán? La sociedad en sí es una mierda, si lo haces te critican y si no también. Si comes mucho eres gordo, si no, anoréxico. Si te deprimes quieres llamar la atención, si no te deprimes vas de dura. Enserio, llegados a este punto ¿qué más dará lo que los demás puedan pensar de ti? Que piensen lo que quieran, seguro que habrá gente mejor que tú pero también peor, así que que dejen en paz a los soñadores, a los que tenemos una meta. Que si no saben, no hablen. Es fácil. Hay que aprovechar ahora, vivir sin preocupaciones, sin miedo a ese jodido qué dirán. Sé feliz. Te lo mereces.

sábado, 4 de octubre de 2014

Escribirte.

Noches como la de hoy sólo me apetece escribirte.
Y podría escribir cómo son tus labios, tus ojos o tu pelo comparándolo con cualquier metáfora que me venga a la cabeza con el humo de ese cigarrillo, pero eso está muy visto.
Prefiero besarte directamente en cada semáforo en rojo, en cualquier banco del parque, en medio de cada canción. 
Vales más que cualquier palabra que pudiese escribir, más que cualquier beso, y más que cualquiera que estuviera dispuesto a verte caer, y que no lo harán porque ahí abajo estaré yo para no dejarte caer nunca más.
Deberías ser la persona más feliz del mundo, porque te lo mereces. Eres demasiado buena persona como para andar en canciones tristes.

miércoles, 1 de octubre de 2014

Hipócritas

Tenemos miedo a aferrarnos a esos labios porque nos da miedo enamorarnos y que vuelvan a romper a este de aquí de la izquierda en mil trozos tras miles de orgasmos y besos falsos. Hipócritas. ¿Qué pasa cuando coges un folio y lo arrugas en tu puño? Por mucho que luego lo estires no volverá a ser el mismo, a estar igual de bien. Y tenéis esa odiosa manía de utilizar a las personas como objetos inservibles pero lo que no sabéis es que sin ellas estaríais perdidos en un mundo algo injusto donde nada es lo que parece, te engañan y pretenden que seas una sumisa mascota para que no protestes. Y al fin y al cabo solo somos un granito de arena más, clones unos de otros, y que por más que nos aferremos al suelo, el viento nos dejará caer en algún sitio y entonces, estaremos perdidos.